La lactancia materna en los bebés con frenillo y otros problemas orofaciales

Uno de los Seminarios que pudimos disfrutar el jueves, 7 de abril, en el VI Congreso Español de Lactancia Materna que se celebró en Ávila abordó un problema con el que se encuentan muchas madres y que, hoy por hoy, resulta controvertido entre los pediatras: La lactancia materna en los bebés con frenillo, a cargo de Luis Ruiz,  del MSC Materno Infantil de Gavà Salut Familiar y moderado por Adolfo Gómez-Papí.

Os dejamos el resumen:

Ponencia La lactancia materna en los bebés con frenillo y otros problemas orofaciales.
Luis Ruiz, MSc materno Infantil Gava Salut Familiar y Moderado por Gomez Papí
Hemos pasado de desconocer a que todo sea frenillo. Hace tiempo decíamos que el frenillo sublingual no afectaba a la lactancia materna, pero ahora hay que cambiar el chip.
Hoy en día, si buscamos en internet, podemos encontrar lo que dice la RAE, la información de la AEPED sobre frenillo y algunos enlaces en internet como www.brianpalmerdds.com/bfeed_frenulums.htm
Luis Ruiz nombró los estudios y el trabajo de la Dra. Carvalho, odontopediatra, por si queréis buscar información sobre su trabajo y la relación de la respiración bucal con el frenillo.
En cuanto a la relación entre el frenillo y la lactancia materna, sabemos que comprime el pezón y produce dolor, existe una dificultad para la succión, se produce un mal ajuste, las tomas son muy largas, la posición es inadecuada al mamar y todo esto conduce al abandono de la lactancia.
Se le quita importancia al frenillo porque no es un problema, sino una dificultad, porque se puede amamantar con frenillo, los niños resuelven y las madres se acostumbran al dolor.
Durante el seminario, el doctor Ruiz ofrece algunos vídeos realizados de una ecografía de una toma que muestra cómo es la succión normal: el pezón está presionando el paladar profundo, se ve como oscila la lengua, ordeña y sale la leche a chorro.
Sin embargo, en otro de los vídeos, se ve una ecografía de un niño mamando con frenillo: se observan los problemas que tiene con la lengua, no consigue ordeñar bien… En Barcelona ya se ha hecho la primera ecografía submaxilar, la primera a nivel nacional.
El doctor Ruiz ha visto lactancias prolongadas (2,5 años) con niños con frenillo de Tipo II, es decir, se puede amamantar, pero ¿cómo?: Mejorando la posición, mejorando la hiperextensión de la cabeza del bebé para conseguir introducir el pezón más profundamente. “La posición sigue siendo fundamental”.
Desde finales de los 90, el Dr. Ruiz ha estado leyendo e informándose sobre el frenillo, y llega a a la conclusión, cinco años después de empezar a leer información, y por la presión de las madres, de que hay que derivar a los niños con frenillo sublingual al cirujano. En 2005 tardaban entre 1 mes y 1 mes y medio en intervenir de frenillo.
En los años posteriores empieza a intervenir algún frenillo en el servicio de urgencias del Hospital en el que trabaja, y en el centro de salud. Estas intervenciones han ido en aumento, remitidas al centro de salud por grupos de madres, por compañeros sanitarios, por el boca a boca entre madres, y por asistentes habituales a la consulta (hermanos).
Durante su experiencia ha visto que 1 de 5 niños, tenían frenillo, pero ¿había más?
Quizás muchos casos con retronactia ligera y paladar ojival podrían haber sido intervenidos de frenillo.
¿Cómo podemos identificar el frenillo?
Callo de lactancia
Boca torcida
Cuando el bebé llora, la lengua no la sube al paladar
La lengua se queda abajo y presenta un surco
Y si levanta la lengua, se observa un frenillo de tipo II
Hemos de insistir en que dar de mamar es un placer carnal, es físico. No debe haber ninguna molestia y si la hay, es que está pasando algo.
Las madres pueden acostumbrarse al dolor, a la molestia y sentir, de manera sorprendente, cómo desaparecen las molestias cuando se interviene un frenillo que está causando problemas a la madre.
Es muy interesante ver cómo el frenillo influye en el habla y en los problemas dentales, hay muchos adultos que llevan toda la vida con problemas de dicción y que han descubierto que es un problema de frenillo cuando han intervenido a sus hijos por problemas con la lactancia.
El futuro:
Difundir el tema, animar a investigar, determinar los parámetros claros (para detectar los tipos I, II, III y IV) Buscar otros métodos de diagnóstico, como la ecografía submandibular y mejorar la salud de los niños con algunas frenectomías (escisión del frenillo).
Es importante valorar el ahorro de este tipo de intervenciones porque son niños que no acudirán al logopeda, odontopediatra…
Hay una gran discrepancia en los estudios internacionales según la incidencia.
Conclusiones:
Es frenillo es frecuente, dificulta la lactancia aunque no la impide, no duele pero molesta y cuesta que se adapte, pero se puede.
¡No todo es frenillo!

Ponencia La lactancia materna en los bebés con frenillo y otros problemas orofaciales.

Luis Ruiz, MSc materno Infantil Gava Salut Familiar y Moderado por Gomez Papí

Hemos pasado de desconocer a que todo sea frenillo. Hace tiempo decíamos que el frenillo sublingual no afectaba a la lactancia materna, pero ahora hay que cambiar el chip.

Hoy en día, si buscamos en internet, podemos encontrar lo que dice la RAE, la información de la AEPED sobre frenillo y algunos enlaces en internet como www.brianpalmerdds.com/bfeed_frenulums.htm

Luis Ruiz nombró los estudios y el trabajo de la Dra. Carvalho, odontopediatra, por si queréis buscar información sobre su trabajo y la relación de la respiración bucal con el frenillo.

En cuanto a la relación entre el frenillo y la lactancia materna, sabemos que comprime el pezón y produce dolor, existe una dificultad para la succión, se produce un mal ajuste, las tomas son muy largas, la posición es inadecuada al mamar y todo esto conduce al abandono de la lactancia.

Se le quita importancia al frenillo porque no es un problema, sino una dificultad, porque se puede amamantar con frenillo, los niños resuelven y las madres se acostumbran al dolor.

Durante el seminario, el doctor Ruiz ofrece algunos vídeos realizados de una ecografía de una toma que muestra cómo es la succión normal: el pezón está presionando el paladar profundo, se ve como oscila la lengua, ordeña y sale la leche a chorro.

Sin embargo, en otro de los vídeos, se ve una ecografía de un niño mamando con frenillo: se observan los problemas que tiene con la lengua, no consigue ordeñar bien… En Barcelona ya se ha hecho la primera ecografía submaxilar, la primera a nivel nacional.

El doctor Ruiz ha visto lactancias prolongadas (2,5 años) con niños con frenillo de Tipo II, es decir, se puede amamantar, pero ¿cómo?: Mejorando la posición, mejorando la hiperextensión de la cabeza del bebé para conseguir introducir el pezón más profundamente. “La posición sigue siendo fundamental”.

Desde finales de los 90, el Dr. Ruiz ha estado leyendo e informándose sobre el frenillo, y llega a a la conclusión, cinco años después de empezar a leer información, y por la presión de las madres, de que hay que derivar a los niños con frenillo sublingual al cirujano. En 2005 tardaban entre 1 mes y 1 mes y medio en intervenir de frenillo.

En los años posteriores empieza a intervenir algún frenillo en el servicio de urgencias del Hospital en el que trabaja, y en el centro de salud. Estas intervenciones han ido en aumento, remitidas al centro de salud por grupos de madres, por compañeros sanitarios, por el boca a boca entre madres, y por asistentes habituales a la consulta (hermanos).

Durante su experiencia ha visto que 1 de 5 niños, tenían frenillo, pero ¿había más?

Quizás muchos casos con retronactia ligera y paladar ojival podrían haber sido intervenidos de frenillo.

¿Cómo podemos identificar el frenillo?

Callo de lactancia

Boca torcida

Cuando el bebé llora, la lengua no la sube al paladar

La lengua se queda abajo y presenta un surco

Y si levanta la lengua, se observa un frenillo de tipo II

Hemos de insistir en que dar de mamar es un placer carnal, es físico. No debe haber ninguna molestia y si la hay, es que está pasando algo.

Las madres pueden acostumbrarse al dolor, a la molestia y sentir, de manera sorprendente, cómo desaparecen las molestias cuando se interviene un frenillo que está causando problemas a la madre.

Es muy interesante ver cómo el frenillo influye en el habla y en los problemas dentales, hay muchos adultos que llevan toda la vida con problemas de dicción y que han descubierto que es un problema de frenillo cuando han intervenido a sus hijos por problemas con la lactancia.

El futuro:

Difundir el tema, animar a investigar, determinar los parámetros claros (para detectar los tipos I, II, III y IV) Buscar otros métodos de diagnóstico, como la ecografía submandibular y mejorar la salud de los niños con algunas frenectomías (escisión del frenillo).

Es importante valorar el ahorro de este tipo de intervenciones porque son niños que no acudirán al logopeda, odontopediatra…

Hay una gran discrepancia en los estudios internacionales según la incidencia.

Conclusiones:

Es frenillo es frecuente, dificulta la lactancia aunque no la impide, no duele pero molesta y cuesta que se adapte, pero se puede.

¡No todo es frenillo! fue la frase con la que acabó el Seminario el Doctor Ruiz.